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Andrés Carmona y Antonio Fonseca, autores del libro "profesor de secundaria" |
En el aula de filosofía del IES
Hermógenes Rodríguez tenemos un interesante y sugerente encuentro con Andrés Carmona y Antonio Fonseca, autores del libro “profesor de secundaria, claves para lograr la autoridad en el aula
educando por competencias” para hablar de educación y hacerles una
entrevista que acerque a todos los lectores su visión de la educación y de
varios de los temas que se desarrollan ampliamente en libro. Los autores han
respondido generosamente el extenso cuestionario que hemos preparado los
redactores del blog. Esperamos que la entrevista sirva a los lectores para
conocer mejor a los dos profesores y les resulte sugerente para una posterior
lectura del libro.
¿Qué es para vosotros la educación?
Es un término
muy complejo que puede abordarse desde múltiples perspectivas. En el contexto
en el que nosotros nos movemos, podríamos decir que consiste en lograr que el
alumnado adquiera una serie de competencias necesarias para desenvolverse como
individuo autónomo en su sociedad de referencia.
¿Cuál es el papel de la escuela en el siglo
XXI?
De acuerdo a
lo anterior, la escuela del siglo XXI debe hacer que el alumnado adquiera esas
competencias necesarias que decíamos antes para ser autónomos en la sociedad en
la que vivimos en el siglo XXI, no en la sociedad del siglo XX ¡o incluso en la
del XIX!
¿Cuál sería el perfil de un profesor del siglo XXI?
Alguien
preparado para educar a su alumnado en esas competencias, lo que implica
dominarlas él mismo y estar formado para enseñarlas adecuadamente. Hoy en día
no basta con ser un experto en una materia, sino que hacen falta otras
capacidades, destrezas, etc., que podríamos llamar “competencias docentes”: un
saber-hacer para enseñar en el siglo XXI, y que incluye, por ejemplo, dominar
las nuevas tecnologías, saber idiomas, manejar emociones, etc.
Cuando sacasteis las oposiciones no os pidieron muchas de las
competencias que se requieren ahora, ¿Por qué tendríais que actualizaros y
saber idiomas, o manejar las nuevas tecnologías?
Porque sin eso
no se puede educar al alumnado para que sea competente en el mundo actual. Por
ejemplo, en la edad media, para poder acceder al conocimiento, tanto para
enseñarlo como para aprenderlo, era necesario saber latín, porque todo el saber
estaba escrito en latín. Hoy en día, el latín del siglo XXI es el inglés, nos
guste o no. Y ese saber ya no está en las bibliotecas tradicionales solamente,
está en internet y se accede con las nuevas tecnologías. Si entendemos que un
profesor en la edad media tenía que saber latín, es fácil comprender que uno
del siglo XXI debe saber idiomas y nuevas tecnologías.
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Andrés Carmona Campo, profesor de filosofía
del IES Hermógenes Rodríguez |
¿Por qué habéis decidido escribir un libro con este contenido?
Al principio
estaba dirigido al profesorado novel, al que empieza o quiere empezar en la
enseñanza. Queríamos ofrecerle consejos muy prácticos, desde la experiencia,
que no están en otros libros o cursos, para que no se llevara sorpresas ni
metiera la pata en sus primeros días. Con el tiempo, nos dimos cuenta de que lo
íbamos escribiendo resultaba útil para todo el profesorado, no solo para el que
empieza, porque todos los cambios en la Educación requieren de un reciclaje o
actualización de todo el profesorado, también del más veterano.
¿Por qué lo escribisteis juntos?, ¿compartís todo el contenido del
libro?
Porque los dos
teníamos el mismo interés en escribir algo dirigido a quienes empiezan y
compartir nuestras experiencias para que fueran útiles a quienes quisieran
leerlas. Además, coincidíamos en muchas cosas. No obstante, no estamos de
acuerdo en todo, pero era más lo que teníamos en común que lo que no, por eso
decimos hacerlo entre los dos. Además, el trabajo cooperativo es otra de las
apuestas del libro, y el propio libro es un ejemplo de ello en su elaboración.
¿Es un libro para ser leído por alumnos y padres?
Principalmente,
es un libro de profesores para profesores, porque está orientado de forma muy
práctica a los docentes y su trabajo diario. No obstante, hay ideas generales
sobre la educación, el proceso de enseñanza-aprendizaje, etc., que puede ser
también útil para padres, alumnos, y cualquiera que, en general, tenga cierto
interés en la Educación.
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Antonio Fonseca Morales, profesor de
educación física del IES Hermógenes |
¿Es un libro de autoayuda para profesores noveles?
No. Es más,
rechazamos la literatura de autoayuda, como decimos en la introducción del
libro. Si por autoayuda entendemos que es un libro en el que el docente novel
(y el veterano) va a encontrar consejos prácticos y útiles para su trabajo
diario, sí puede serlo. Pero si por autoayuda entendemos lo que se vende bajo
esa etiqueta en las librerías, entonces no, no es un libro de autoayuda. La
literatura de autoayuda viene a decirte que cualquier cosa es posible solo con
imaginarla, ser positivo y sonreír por las mañanas, sin más que eso o si acaso
con ayuda de algún principio “mágico” o pseudocientífico, y nosotros no pensamos
eso.
¿Cada maestrillo tiene su librillo o pueden tener un libro común?
Ambas cosas
son necesarias y complementarias. Hay aspectos comunes, principios generales,
que es bueno y deseable que todo el profesorado tenga en común. Pero luego cada
docente es particular y tiene su forma concreta de personalizarlo y adaptarlo a
su forma de ser y de enseñar, y ahí lo que vale para uno no tiene que servir,
necesariamente, para otro. Pero creemos que se podría decir lo mismo casi de
cualquier disciplina científica, artística o deportiva.