Quizás no
éramos conscientes de los que nos esperaba
hasta que entramos y comenzamos a
ver, a escuchar, a sentir y a vibrar. No estamos acostumbrados a escuchar
música clásica, como mucho la que oímos en clase de música, y la que escogen para
los anuncios de televisión, pero aquel día tuvimos la oportunidad de sentirla, de dejarnos atravesar, de
impregnarnos de ella, de conocer el origen y los sentimientos que hicieron que
esta música germinara, reflejo de
situaciones, conflictos, guerras, impotencia, tristeza, supervivencia….
La música es el arte que llega más rápido y
más directo al corazón, y el impacto es total si es en vivo, si te lo van explicando
magistralmente, si es interpretada por jóvenes apasionados y virtuosos, y en un
marco impecable como el Auditorio Nacional de Música de Madrid.
Música de la primera mitad del siglo XX,
época de guerras, de conflictos, de caos, de muerte, de silencio…..¿de
silencio?....no, el arte, la música, seguían vivos, recogiendo y reflejando el
sentir del hombre en esta dura etapa de la humanidad.
Todo esto y mucho más descubrimos el día 23
de Febrero alumnos de 3º y 4º de la ESO, ¿Richard Strauss, Dimitri
Shostakovich?....HÉROES que fueron
capaces, a través de sus composiciones, de mostrar al mundo la época que les
tocó vivir, en la Alemania nazi y en la censura soviética de Stalin.
Son ya varios años los que llevamos
asistiendo a estos conciertos didácticos, organizados por el departamento de
Música de nuestro centro, gracias a la Fundación Albéniz y a la Escuela de
Música Reina Sofía. El año que viene volveremos, para experimentar nuevas
sensaciones, nuevas músicas, nuevos compositores, nuevas experiencias de vida a
través de la música.
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