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miércoles, 9 de mayo de 2018

KLEROTERION: de la Atenas del V a.C. a la Herencia del XXI


Los alumnos de 1º de Bachillerato A y B del IES Hermógenes Rodríguez han participado en el sorteo público del pleno vecinal con un kleroterion colaborando con el Ayuntamiento. 
Con el objetivo de implicar a la comunidad en la aplicación de los presupuestos municipales, el partido socialista llevaba los presupuestos participativos en su programa de gobierno. Se estudiaron varias formas para elegir a los ciudadanos que llevarían a cabo esta labor. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Herencia optó por remontarse a la Atenas clásica y hacer un guiño a la democracia directa en la que cualquier ciudadano podía tener la responsabilidad en las instituciones legislativas o judiciales saliendo elegido por sorteo.
Para realizar el sorteo en la Atenas clásica utilizaban el kleroterion, que era un bloque de piedra con una serie de ranuras ordenadas en filas. Cada ciudadano tenía un documento de identidad pinakion, que era una placa de bronce o de madera con su nombre grabado. Al empezar la Asamblea cada ciudadano introducía su placa en la ranura que quería. Una vez que todas estaban completas, un oficial de justicia (llamado archón) echaba bolas de bronce blancas y negras en un embudo de la parte superior del kleroterion. Las bolas bajaban por un tubo y eran mezcladas por un dispositivo de rotación. Luego, se iban extrayendo sucesivamente por la parte inferior. De arriba hacia abajo, se iba definiendo si cada fila de candidatos era aceptada como jurado. Si salía bola blanca, la fila de ciudadanos era incorporada al jurado. Si salía bola negra, era excluida. Y así sucesivamente hasta agotar el número de filas.
Para el sorteo en Herencia se ha diseñado un kleroterion con 150 ranuras (30 filas con 5 columnas A, B, G, D, E). Las placas son de madera enumeradas del 1 al 150. Estas placas se fueron insertando por todos los asistentes al sorteo en las ranuras del kleroterion. Para elegir las filas se utilizan el sistema de bolas. Se echan 30 bolas (27 negras y tres blancas) en un saquito negro, esto se conoce como la insaculación, de la expresión latina in sacculo (en el saquito), se remueven y se dejan caer por el kleroterion, las bolas blancas marcarán las tres filas que corresponderán a los ciudadanos elegidos. Como son trece ciudadanos, tantos como los concejales actuales, los elegidos corresponderán a las dos primeras filas completas de bolas blancas y a las tres primeros tablillas de la tercera fila con bola blanca.
Para saber a qué ciudadano corresponde cada tablilla que ha salido en el sorteo, se multiplica por 29 el número de cada tablilla seleccionada. Se multiplica por 29 porque es el número resultante de dividir el censo actual entre 150.
Este es el sistema aleatorio que se ha utilizado para elegir a los 13 ciudadanos que en tres sesiones plenarias decidirán el destino de los 30.000 € de los presupuestos participativos. Si algún ciudadano renuncia a su responsabilidad de formar parte de este pleno de ciudadanos se nombrará al siguiente o siguientes del censo electoral.
Todo este proceso se está realizando con la dirección y supervisión de la Universidad Carlos III de Madrid.



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