El día 21 de febrero, el departamento de francés, ha realizado durante el recreo un desayuno muy dulce a base de crepes.
El objetivo ha sido acercar al alumnado a las tradiciones francesas. Con motivo de la reciente festividad de la Candelaria (La Chandeleur), fiesta muy celebrada en Francia, los alumnos han preparado crepes en su casa para degustar los en clase.
Dice la tradición, que para tener fortuna durante el año, se deben cocinar los crepes con una pieza de oro en una mano mientras con la otra se voltean los crepes en el aire. ¡¡¡GUAU!!! Si esta hazaña es favorable, la persona será afortunada todo el año.
Nuestros alumnos de 1° ESO serán los más afortunados de este 2019. Al menos han sido los más dulces.
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