Crónica de Juan Ortuno Rodríguez, alumno de 1º de bachillerato.
El pasado miércoles 24 de abril,
los alumnos de clásicas del IES Hermógenes Rodríguez emprendimos una excursión a la ciudad
Romana de Segóbriga, un importante yacimiento celtíbero y romano,
situado en unos de los cerros de la localidad conquense de Saelices y declarado
el pasado 3 de junio de 1931 como bien de interés cultural.
A eso de las 10.30 de la mañana
inició su salida el autobús hacia dicho lugar, aunque, debido a las
inclemencias temporales y para tristeza de todos, la visita finalmente tuvo que
ser cancelada, trasladándonos así al vecino pueblo de Tarancón, separado del
enclave a unos cuantos kilómetros.
El ayuntamiento del pueblo, de
forma gratuita, cedió su auditorio para que pusiera en escena las dos
obras el grupo "Párodos" del IES Siberia Extremeña de Talarrubias (Badajoz).
Llegamos al lugar sobre las doce
de la mañana y tras una pequeña caminata, nos dispusimos a entrar al interior
del auditorio para poder ver la comedia de Plauto “Los
gemelos”, tal fue nuestra sorpresa que al entrar el espacio se encontraba
totalmente lleno, ya que desde mi punto de vista la organización fue bastante
lamentable. Pasados unos minutos, consiguieron acoplarnos a todos en nuestros
sitios y así poder dar comienzo a la obra, una comedia que mezclaba la historia
de dos hermanos gemelos con una serie de arrebatos y chistes
totalmente actuales y que desde mi punto de vista estaban muy bien preparados.
Una vez acabada la obra, el IES
junto a la gran cantidad de institutos que allí se encontraban, comenzamos a
abandonar nuestra butaca para poder salir fuera, donde comenzó un descanso de
15 minutos en el que pudimos comernos el desayuno y comentar la obra. Llegó el
momento de entrar de nuevo, la segunda obra estaba a punto de empezar, en este
caso Antígona, una tragedia de Sófocles que contaba la vida de una joven,
hija de Edipo y Yocasta, que tras la muerte de su hermano y por orden del rey
Creonte de no enterrarlo, decide desobedecer y ofrecer su vida a cambio del
descanso digno de su hermano, poniendo de manifiesto el amor que el ser humano
puede sentir hasta tal punto de dar la vida por quien verdaderamente le
importa, otra obra que, sin lugar a duda, volvió a brillar sobre el escenario.
“Y si te parezco estar haciendo locuras, puede ser que ante un
loco me vea culpable de locura“ — Sófocles, (Antígona a Creonte)
Fue en torno a las tres y media, cuando, tras finalizar la obra, decidimos volver
al autobús para poner en marcha nuestro camino de vuelta a nuestros respectivos
pueblos. Un día totalmente distinto, en el que pudimos hacer cosas muy diferentes a las habituales, aunque no todos pensemos igual, como podéis
observar, opiniones para todos los gustos... y con muchas ganas de volver a
repetir, eso sí, esta vez con la certeza de que podamos ver Segóbriga y
disfrutar de obras tan maravillosa como estas en su famoso teatro.