Con un calor veraniego que no esperábamos y que ha trastocado un poco los planes, los días 25 y 26 de abril hemos celebrado en el IES Hermógenes Rodríguez nuestras Jornadas Medievales y estamos muy satisfechos por los resultados.
Han sido dos días intensos de
actividades en las que, solapándose con las clases en una complicada
organización que tuvo que ser ajustada hasta el último minuto en jefatura de
estudios, han podido participar en mayor o menor medida todos los alumnos del
centro.
La
génesis de una idea
La propuesta de organizar un
Mercado Medieval partió de Antonio Luna, del departamento de Historia. ¡Y se
produjo la magia! Parece que se alinearon los planetas, la idea cuajó bien entre
todos y, como dicen por ahí, las ideas son promiscuas, van cruzándose unas con
otras, crecen y crecen, se transforman hasta convertirse en algo nuevo y
sorprendente, más variado, más rico, más de todos. Es difícil resumir todo el trabajo realizado por
el conjunto del centro y los resultados obtenidos sin olvidarse de algo o de alguien,
pero lo que está claro es que, sin la colaboración de todos, personal docente,
no docente y alumnos, es imposible organizar la que aquí se ha liado.
Los departamentos y
el equipo directivo empezaron a presentar a la CCP sus propuestas para
actividades propias de sus materias o para actuaciones comunes tirando de
contactos y de conocidos. No hizo falta pedir la colaboración de nadie porque
todos, desde nuestros distintos puestos, nos pusimos en marcha aportando ideas
y trabajo. Así, aquella idea inicial tomó vida propia y empezó su metamorfosis.
¡Es increíble lo que se puede llegar a hacer cuando toda la comunidad rema en
la misma dirección! Son momentos únicos y especiales que deberían ser lo
habitual en los centros educativos.
Pero vayamos por partes:
La
financiación
Nos guste o no, las cosas cuestan
dinero y las posibilidades de los centros educativos no dan para grandes
alegrías. Pero ahí está la fuerza de la comunidad para sacar adelante los
proyectos en los que creemos. Para tener un punto de partida, como en jornadas
anteriores, la dirección del centro gestionó la colaboración económica de
empresas, entidades bancarias y Ayuntamiento de Herencia. Una valiosa ayuda que
siempre nos han prestado y que no dejaremos de agradecer. Este año hemos
intentado sacar el mayor partido posible de esta colaboración celebrando la
Jornada Itínera23 y las Jornadas Medievales para conseguir orientar y enseñar
de otra manera. Solo con la imaginación, a veces no basta, hacen falta medios.
La
ambientación
¡Y aquí ya nos fuimos viniendo
arriba! A la vuelta de Semana Santa, buena parte del trabajo que había estado
cociéndose a fuego lento en los meses anteriores empezó a salir a la luz. La decoración
de los espacios tenía que invitar a participar, creando en el aire un algo
especial, un entorno mágico que nos transportara a otra época, a otra manera de
pensar y de vivir.
Los pasillos y vestíbulos fueron llenándose
de muros de castillos, almenas, escudos, vidrieras y lámparas elaborados por
los alumnos de Educación Plástica y Visual y de Tecnología, que bullían con sus
profesores arriba y abajo.
Los alumnos de 4º Aplicadas
llenaron una pared de teselas que habían elaborado en clase de Matemáticas
basándose en cuestiones de geometría. También 4º Aplicadas y 3º ESO crearon banderines
en clase de Inglés para decorar los pasillos, la entrada y el patio de las
actuaciones al aire libre.
Los de 2º ESO con sus profesores
de Historia se volcaron frenéticamente en la decoración de sus aulas
compitiendo en un concurso que acabó en empate a tres porque todas quedaron
espectaculares.
Parte de la sala de Usos
Múltiples se convirtió en un taller-exposición de medidas medievales
maravillosamente ambientado por el departamento de Matemáticas con elementos
antiguos aportados por profesores y alumnos.
Los profesores y alumnos de
Música y de Artes Escénicas y Danza ensayaban sin descanso canciones y bailes
medievales para sus pasacalles, llenando de sonido y ritmo todo este ambiente
festivo.
El departamento de Francés
decoraba su cubículo de adivinación en el despacho de Orientación, ¿dónde
mejor?, a la vez que iniciaba a sus alumnos en el difícil arte del Tarot de
Marsella.
Los departamentos de Lengua y de
Inglés tomaron al asalto la Biblioteca, que por arte de brujas y clérigos quedó
mágicamente dividida en dos mundos que nunca dejaron de convivir en la Edad
Media, el pagano y el cristiano. Las vidrieras creadas en clase de Lengua
tamizaron la luz de las ventanas de la zona del Scriptorium de los monjes. En
el lado opuesto, el departamento de Inglés trajo las cosas que las brujas
solemos tener a mano, telas espectaculares, dragones y ratones, frascas con
brebajes multicolores, cestos y cuencos llenos de especias y semillas, plantas
aromáticas colgando por todas partes y ropajes de hechiceras para crear un
ambiente de cueva de hechizos mágicos. El aroma a incienso, a tomillo, a romero
y a retama se extendía por todo el pasillo.
Los laboratorios de Biología y de
Química hicieron acopio de los productos y los utensilios necesarios para la
elaboración de mágicas formulas alquímicas y de cosmética natural al modo y
manera de los medievales.
En la decoración del espacio
elegido para las actuaciones de magos, cuentacuentos, alfareros y otros
artistas, el equipo directivo y el personal de administración tuvieron que
hacer un trabajo contrarreloj en el fin de semana y el día previo a las
jornadas porque el calor nos obligó a cambiar la ubicación y había que vestir
las columnas a la moda medieval y acondicionar el terreno y las plantas del
patio para acomodar el escenario y las sillas que nos prestó el Ayuntamiento
Para recibir a nuestros invitados
de Primaria como nuevos miembros de la Orden de los Caballeros Hermogeneros,
entre secretaría y administración se diseñaron y elaboraron los medallones para
cada caballero o dama y parte del equipo directivo vistió las galas de la
realeza para hacer los honores de la investidura en el día señalado. El Ayuntamiento
de Herencia nos prestó los tronos para los reyes y la Parroquia de la
Inmaculada los estandartes.
Y, por último, como había que
estar a tono con el entorno, hubo que ir pensando cómo vestirse al modo
medieval, cada uno con el personaje de su agrado o de su profesión en ese mundo
antiguo. Los alumnos son más tímidos y pocos se atrevieron a disfrazarse, cosas
de la edad, pero muchos de los docentes y no docentes no tuvieron reparo en
cambiar de atuendo por un par de días: clérigos, hechiceras, adivinas, músicos,
danzantes, reyes, reinas, pajes, caballeros cruzados, damas... todos paseando
por los pasillos en una extraña mezcla de épocas y culturas.
En fin, nos extendemos mucho,
pero no queríamos dejar fuera nada ni a nadie de toda la metamorfosis que
sufrió el instituto de arriba a abajo.
El programa de
actividades para los días 25 y 26 era amplio y variado.
A lo largo de la mañana, todos los talleres de los departamentos funcionando según sus turnos:
- Taller de unidades y medidas antiguas (Matemáticas)
- Taller de cosmética (Biología)
- Taller de alquimia (Química)
- Taller de hechizos mágicos (Inglés)
- Taller de escritura medieval (Lengua)
- Tarot de Marsella (Francés)
Algunos venidos de fuera:
- Taller de yesería (Alhambra)
- Taller de azulejería (Alhambra)
- Taller de alfarería (Hermanos Peño)
Y unas cuantas actuaciones especiales:
- Explicación del origen de los reinos peninsulares y Lectura de la Carta Puebla (alumnos de Historia de 2º ESO
- Pasacalles, concierto medieval y danzas (alumnos de Música y Artes Escénicas y Danza)
- Sesión de magia con David Navares
- Cuentacuentos con Victoria Gullón
- Lucha medieval con Bohurt La Mancha
- Ceremonia de investidura de caballeros
- Investidura de los caballeros y damas de la Orden de los Caballeros Hermogeneros (Dirección y Jefatura de Estudios con todos los alumnos de 6º del CEIP Carrasco Alcalde)
- Pasacalles y danzas medievales
- Charla con el molinero Juan Bautista Sánchez Olivares
Dos días agotadores, llenos de emociones, de diversión y de aprendizajes. Otras formas de enseñar y de aprender por las que llevamos años apostando en el Hermógenes a través de las jornadas que hemos ido organizando con distintos formatos. Un esfuerzo que damos por bien empleado porque los proyectos que se comparten entre todos en los centros educativos siempre funcionan para los alumnos. Merece la pena organizarlos y disfrutarlos. ¡Nos quedamos con ganas de más!